La noche esperada llegó este miércoles 6 de octubre en el Estadio Dorados, después de una gran espera la afición escamada regresó para apoyar al Gran Pez durante los 90’ minutos del encuentro, contando con un aforo de aproximadamente 2 mil 800 aficionados, en donde el cuadro local encontró confianza, inspiración y dinamismo; sin embargo, no pudo encontrar el gol que marcara la diferencia en la capital sinaloense.
El primer tiempo del encuentro se presentó muy cortado entre faltas, tiros de esquina, saques de meta y fuera de lugar, ambos equipos llegaban al área rival sin lograr mover el marcador. Por un lado Tepatitlán, con las pocas llegadas al arco local, no lograba atravesar la muralla de la defensiva aurinegra, y Luis López atajó varias oportunidades para evitar el gol rival, mientras que Sinaloa intentaba romper el arco a pesar de que el balón terminaba desviándose una y otra vez para ahogar el grito de gol en el Coloso del Humaya.
El segundo tiempo fue un partido completamente diferente en comparación a la etapa inicial, con la variación en la posesión del balón el cual pasó completamente para Dorados y se mantuvo en el área rival. Al minuto 52´ un centro perfecto con dirección a Paolo Yrizar se terminó impactando de lleno en el poste de la meta jalisciense para quedarse a centímetros de abrir los cartones en la noche del reencuentro con la parcialidad dorada.
El compromiso finalizó sin movimiento en el tanteador, con un Dorados que impulsado por su gente y por la estrategia ofensiva de su entrenador, finalmente no pudo concretar ninguna acción en las redes, pese a los intentos de Adrián Marín, Raúl Zúñiga e Yrizar, con un equipo abalanzado completamente en territorio alteño.
La tropa de Rafael García recibirá descanso este jueves, reportando al trabajo de entrenamientos la tarde del viernes. Sinaloa recibirá el próximo 13 de octubre a Raya2 Expansión, cuadro en el que limita el goleador chileno Humberto Suazo.
