Señala que 24.5 millones de estudiantes de educación básica ya se enfrentan a un cierre de ciclo escolar sin planeación, ni guía para las siguientes semanas.
hace un llamado a la autoridad federal para orientar con claridad a docentes y directores escolares, a fin de que durante las semanas que quedan de clases puedan dedicarse a actividades de recuperación de aprendizajes, refuercen temas rezagados de lectura y matemáticas, pero también se abran a la posibilidad a desarrollar actividades lúdicas, artísticas y deportivas para los estudiantes de educación básica inscritos en este ciclo escolar.
Laura Ramírez, directora de activación dijo que este ciclo escolar significaba el mayor desafío para el sistema educativo, y la oportunidad para identificar y buscar a las y los estudiantes ausentes, recuperar aprendizajes perdidos, resaltar otros aprendizajes que se dieron en casa, mantener un vínculo fuerte con las familias y acompañar y formar a las y los docentes en el tema socioemocional para que a su vez, ellas y ellos pudieran hacerlo con sus estudiantes.
Comentó que no es prioridad porque la SEP instruyó a la no reprobación y llamó a los estados a no concluir el ciclo anticipadamente, pero dichas medidas son planteadas sin ninguna estrategia real para fortalecer el aprendizaje, lo que las convierte en una simulación.