Previo a la supuesta llegada del Presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador, a la zona de la Presa Picachos, este domingo en Mazatlán, en donde se presuntamente realizaría un recorrido en sobrevuelo, se hicieron presentes manifestaciones pacíficas, sin embargo, las personas inconformes se quedaron esperando.
Justo al acceso a la Presa Picachos llegaron más de 20 integrantes de la familia Burgueño, mismos que en recientes ocasiones han estado haciendo visible su problemática, ya que buscan ser indemnizados por unos terrenos ubicados en la zona de Marina-Cerritos de los que presuntamente fueron desalojados.
Jazmín Burgueño, una de las afectadas, recordó que hoy en esos terrenos ya hay construidos hasta hoteles de conocidos empresarios mazatlecos y buscan que les paguen por los predios, por lo que, piden el apoyo de los gobiernos federales y estatales para que "destraben" los procesos judiciales que están interpuestos desde 2012 y que hasta la fecha no han sido resueltos a decir de ella: por "mano negra".
Pero también, quienes están inconformes son los comuneros de San Marcos que se oponen a la construcción de la hidroeléctrica, proyecto que es impulsado por López Obrador, debido a que no les han pagado por las tierras de uso común.
En total son 250 comuneros los afectados por las más de 300 hectáreas que están siendo usadas y hasta el momento no han tenido acercamiento con ninguna autoridad, así lo dijo uno de los comuneros, Fabián Valle Moreno.
La supervisión en la Presa Picachos que formaba parte de las actividades privadas estaba programada a las 10:00 horas, sin embargo, tras esperar más de dos horas al Presidente de la República, los manifestantes optaron por retirarse pues nunca llegó.
