Con el aumento del precio en los insumos, los industriales tuvieron que redoblar esfuerzos para mantener vivos sus negocios, ya que aseguran que los costos subieron alrededor de un 50%, razón por la cual este año muchas tortillerías en la zona norte se vieron obligadas a cerrar sus negocios.
Para los empresarios de antaño como el caso de Lorenzo Garza, el cual conforma la tercera generación de 6 que actualmente se dedican a la industria tortillera en su familia, no ha sido fácil. Ya que asegura que debido a los costos, las utilidades bajaron en un 15%. Sumándose además alzas en los precios de distintas aéreas, como en la maquinaria que se opera, el cual aumento en un 40% solo este año.
Dijo que el consumidor final no puede ser el que absorba todo este gasto, por lo que han tratado de muchas maneras de no subir los precios.
Reiteró que la esperanza de la industria, es que el próximo año 2023 el gobierno regule los precios actuales del maíz, ya que son en su mayoría los causantes del incremento en los precios.
