La segunda depresión tropical de 2023 que se formó en la cuenca atlántica se fortaleció este viernes hasta convertirse en la tormenta tropical Arlene, el primer sistema con nombre en la actual temporada ciclónica y que avanza lentamente a través del Golfo de México.
De acuerdo al boletín más reciente del Centro Nacional de Huracanes (NHC, en inglés), Arlene presenta vientos máximos sostenidos de 40 millas por hora (65 km/h) y, en vista de su previsible trayectoria, no ha merecido todavía la emisión de alertas o avisos en zonas costeras.
La tormenta, surgida de la depresión tropical número dos que se formó el jueves, el día del arranque oficial de la temporada ciclónica en el Atlántico, se sitúa a 265 millas (425 kilómetros) al oeste de Fort Myers, en la costa oeste de Florida, y a 340 millas (550 kilómetros) del nornoroeste de Cuba.
Avanza hacia el sur a cerca de 5 millas por hora (7 kilómetros por hora) y se espera que acelere ligeramente su velocidad la noche de hoy, para empezar a debilitarse hasta convertirse el sábado en un remanente de baja presión, según el pronóstico del NHC, con sede en Miami (Florida).
La temporada oficial de huracanes comenzó este jueves en la cuenca atlántica con pronósticos que indican que el número de ciclones puede estar dentro del promedio y la incógnita de cómo afectará la presencia del fenómeno climático de El Niño.
La temporada de huracanes de 2023 en el Atlántico tendrá al menos 12 tormentas con nombres, de ellas entre 5 y 9 se convertirán en huracanes, y al menos uno podría ser huracán mayor, según anunció el pasado 25 de mayo la Administración Nacional Oceánica y Atmosférica (NOAA) de Estados Unidos, cuando vaticinó una temporada "casi normal".
En 2022 hubo 14 tormentas con nombre en el Atlántico, de las cuales Bonnie, Danielle, Earl, Fiona, Ian, Julia, Lisa, Martin y Nicole alcanzaron categoría de huracán.