Gobernador del estado de Sinaloa Rubén Rocha Moya, ha declarado fuerte y claro su desacuerdo de una posible entrada de Mario López Valdez al partido de la cuarta trasformación.
El mandatario estatal expresó que su administración sigue pagando las supuestas “trapacerías” que se cometieron durante la gubernatura de Malova, por lo que sería incongruente estar de acuerdo, cuando MORENA trabaja con el objetivo de eliminar la corrupción.
Mientras tanto, alguna aspiración por Quirino Ordaz Coppel tendría que ser valorada, comentó Rocha Moya, pues aunque no le dejó deudas millonarias al estado, tampoco dejó recursos disponibles mientras regalaba el dinero del puedo, haciendo referencia a los 200 millones de pesos que perdonó con solo 2 millones en el caso del ex secretario de Administración y Finanzas, Armando Villarreal y el desvío de 263 millones de pesos.
De igual forma, Rubén Rocha descartó por completo una alianza con el Partido Sinaloense, pues los desacuerdos expuestos con relación a la Universidad Autónoma de Sinaloa durante las últimas semanas han hecho que cambie de opinión.