Finalmente la líder de las rastreadoras del fuerte Mirna Medina podrá reunir los restos de su hijo Roberto para darle cristiana sepultura.
En julio de 2014, Roberto Corrales Medina fue visto por última vez en la gasolinera a la entrada de el Fuerte donde vendía discos de música, su madre Mirna Medina Quiñones al reportar su desaparición y pedir que se le buscara, solo encontró negativas de la autoridad pues le dijeron que no se dedicaban a buscar cuerpos, desde entonces emprendió con sus propias manos y recursos la búsqueda de su hijo, acciones a las que se le unieron varias madres que pasaban por una situación similar, así surgió el colectivo de las rastreadoras.
El 28 de agosto de 2017 fueron sepultados parte de los restos de Roberto, luego de que se lograran localizar en un predio en las inmediaciones de ocolome el fuerte, pero solo fueron cuatro vertebras que previamente luego de el hallazgo de de dichos restos en julio de ese mismo año y realizar las pruebas de ADN se confirmo que se trataba del hijo de la líder de las rastreadoras.
Luego de haber pasado de la incertidumbre al luto, pues ya consciente de que su hijo había perdido la vida, cada año realizaron una búsqueda en el mismo sitio donde fueron localizados parte de los restos de Roberto, el año pasado se logró localizar una fosa cerca de ese mismo lugar y fue encontrado un cuerpo, al igual que parte de la ropa que portaba Roberto, por lo que se solicitó de nuevo una prueba de ADN, resultando positivo en coincidencia de parentesco, por lo que ahora la líder de las rastreadoras podrá sepultar el resto del cuerpo de su hijo a quien a buscado por años.
El próximo 13 de diciembre le entregaran los restos, para posteriormente llevarlos al panteón de mochicahui el fuerte y finalmente darle cristiana sepultura.
Ahora, la búsqueda será de la verdad y la razón por la cual Roberto fue privado de la vida de esa manera y movidos sus restos en dos ocasiones luego de haber sido asesinado, aseguro su madre, líder de las rastreadoras.
