Pescadores y personal administrativo de diversas pesquerías en Mazatlán se manifestaron en las afueras de CONAPESCA para exigir atención en el sector.
Sandra Lizárraga, contadora pesquera, explicó que no sólo los pescadores se ven afectados sino que son diversas áreas que dependen de la actividad las que se encuentran al borde del colapso.
Los principales problemas señalados fueron la compra de camarón de importación, el cual se ha convertido en una competencia desleal, así como la falta de oportunidades y la desaparición gradual del sector.