Innovaciones en audífonos para el estilo de vida activo
Hay ordenadores que funcionan sin estar conectados. Hay smartphones que funcionan sin estar conectados. Hay reproductores de música que funcionan sin estar conectados. También existen GPS, reproductores de música, relojes inteligentes, libros electrónicos y hasta calculadoras que trabajan de la misma manera. ¿Por qué no irían a actuar así los auriculares?
Una paradoja se presenta en el mundo actual de nuestro consumo diario. Vivimos en una sociedad cada vez más conectada, pero que necesita cada vez menos de conexiones. ¿Cómo es eso?
Tecnologías inalámbricas
La afirmación se refiere a que, en las últimas décadas, con el desarrollo de la tecnología, la tendencia ha ido hacia una independencia de cables físicos, esos que están hechos de cobre o aluminio y que ensamblan distintos puertos de energía.
Estos cambios han sido impulsados gracias a significativos avances en tecnologías inalámbricas, acompañado de una miniaturización de componentes electrónicos. Aun así, está claro que los cables siguen existiendo a montones y continúan cumpliendo funciones esenciales.
Ejemplo de ello son los enormes cables de fibra óptica que permanecen en las profundidades del mar y cruzan océanos para conectar y llevar el Internet a todo el mundo. Pero las nuevas formas de diseño y uso de dispositivos del ser humano en su cotidianeidad, están siempre pensadas para que sean lo más cómodas posibles. Y eso incluye, efectivamente, la no dependencia de un vector físico y tangible.
Los casos mencionados al principio del artículo son una muestra de esta propensión. Pero, en el último tiempo, uno de ellos se ha popularizado y ganado terreno en el universo de los accesorios tecnológicos: los auriculares inalámbricos.
¿Cómo ha sido la evolución de los audífonos?
Hoy nos resulta sencillo y común encontrar en el mercado una amplia variedad de audífonos de este estilo, pero lo cierto es que su comercialización y uso corresponde a una tendencia bastante más tardía que otros dispositivos. Nos parece cotidiano encontrar modelos avanzados y de alta gama como unos Beats Studio Buds funcionales, pero tiempo atrás el catálogo no era tan abundante.
En efecto, con el crecimiento y desarrollo de tecnologías como el Bluetooth y el WiFi, la transferencia de datos de alta velocidad volvió posible la aparición de los auriculares inalámbricos.
La transición de los modelos con cables a los que funcionan vía bluetooth, ha ganado en popularidad por algunas razones. No solo se trata de no preocuparse porque más por cables enredados y que se desgastan con el uso. También ha proporcionado una libertad de movimiento para los usuarios que, a partir de ahora, muchos ya no negocian. O es inalámbrico, o nada.
Los deportistas, pioneros en el uso de auriculares inalámbricos
Modelos como el Beats Studio Buds han significado distintas ventajas en la experiencia auditiva. Y modificaron, claramente, la forma de consumo sonoro en quienes los tienen. En este sentido, los pioneros en su uso fueron los deportistas.
No hablamos de hombres y mujeres profesionales, sino de aquellos que hacen ejercicio. Aquellos que salen a correr o caminar, que levantan pesas en un gimnasio, que hacen yoga, que practican tiros al aro de básquetbol. Para estas personas, los auriculares inalámbricos les han facilitado moverse cómodamente sin restricciones físicas. Y, claro, disfrutar de una buena musicalización para el entrenamiento.
En los primeros tiempos, cuando todavía no estaban en auge, el único sitio donde veíamos estos accesorios era en las plazas, los gimnasios o áreas de actividad física. Observábamos cómo se desplazaban con facilidad sin relegar la experiencia sonora.
Hoy en día, eso se ha trasladado a diferentes espacios que no solo corresponden al entrenamiento y el ejercicio. Lo vemos en quienes tienen reuniones laborales o en quienes viajan en el metro. Su popularidad ha ganado muchísimo terreno.
¿Qué necesidades satisfacen los audífonos?
Son varias las ventajas que satisfacen estos accesorios a los usuarios. Si no, el auge de esta industria no sería el que es hoy. Veamos algunos ejemplos.
Diseño ergonómico
Entre otros beneficios que pueden ofrecer, también se encuentran sus diseños ergonómicos. Es una característica fundamental de estos accesorios, ya que ofrecen comodidad durante periodos de uso prolongado. La idea es que molesten lo menos posible las orejas del usuario.
Buen sonido
La calidad del sonido es otro de los aspectos positivos que tiene. Para quien desee comprarse unos pero tiene dudas sobre sus capacidades, puede estarse tranquilo. En el último tiempo, las mejoras en la calidad del sonido han sido significativas, gracias a avances en la ingeniería de transductores y el poder de procesamiento de señales digitales dentro de los propios auriculares.
Cancelación de ruido
Algunos modelos, incluso, cuentan con tecnologías de cancelación activa de ruido, lo que ofrece una experiencia auditiva inmersiva. Esta opción no la tienen todas las versiones de auriculares, pero, en líneas generales, se trata de la capacidad que ofrecen para reducir o eliminar sonidos no deseados del entorno.
En otras palabras, el usuario escucha más la música que sale del dispositivo que los ruidos externos que haya. Si vamos en el bus con esta modalidad, es probable que no nos enteremos de lo que sucede a nuestro alrededor.
Aunque sin adentrarnos mucho en tecnicismos, explicaremos su funcionamiento. Este sistema crea ondas sonoras que son iguales pero opuestas en fase a esos sonidos ambientales. Cuando estas ondas sonoras inversas se combinan con el ruido original, se cancelan mutuamente, resultando en una reducción efectiva del ruido percibido.
Batería resistente
El desarrollo de baterías más eficientes ha extendido la autonomía de estos dispositivos. La capacidad de reproducción continua ha aumentado considerablemente. Esto se combina, además, con los estuches de los auriculares. No es una mera envoltura del accesorio, sino una fuente de carga de energía que, de manera portátil, podemos llevar a donde queramos.
De esta manera podemos usarlos un largo rato, y después guardarlos en el estuche, que se encargará de recargar la batería sin la necesidad de enchufarse a ningún toma corriente.
Integración con asistentes virtuales
Las posibilidades de estos dispositivos han ido más allá, cuando los fabricantes decidieron que sería una buena idea integrarlos al sistema del smartphone.
Es así que también se pueden usar para dar comandos de voz a asistentes virtuales como Siri, Alexa o Google Assistant. Esto colabora, además, con una no necesidad de sacar el teléfono del bolsillo.
Funciones adicionales
Los usuarios podrán notar que cuentan con controles táctiles o botones integrados que permiten a los usuarios gestionar llamadas, ajustar el volumen y controlar la reproducción de música como más les plazca.
La incomodidad del cable
Frente a este panorama, los auriculares con cable contrastan con los avances tecnológicos que los van dejando atrás. Si bien no dejan de ser funcionales, lo cierto es que sus desventajas quedan muy expuestas frente a los beneficios de aquellos que trabajan vía bluetooth.
Lo primero, que decanta por su propio peso, es la poca movilidad que tiene el usuario. El cable genera que tengamos que estar siempre pendientes de no tocarlo y, peor aún, de que no salga volando producto de algún desplazamiento que hagamos. Hay que estar atentos por si interfieren o se enredan.
Y, si de enredo hablamos, no podemos dejar de mencionar la incomodidad y frustración que provoca cuando se embarullan dentro del bolsillo. Nunca sabemos cómo sucede exactamente, pero, luego de guardarlos, cuando vamos a sacarlos para utilizarlos nuevamente, están completamente enredados.
Esto no solo genera enojo al momento de hacerlo, sino que va más allá. Atentan fuertemente contra su calidad y durabilidad, afectando su vida útil.
Es decir, duran poco. Los cables de auriculares son propensos a desgastarse con el tiempo debido a su flexión y manipulación. Esto puede dar lugar a problemas como cortocircuitos o pérdida de conexión, afectando la durabilidad general.
Por otra parte, también puede engancharse en objetos cercanos, como pomos de puertas, esquinas de muebles o en el equipo en el que esté conectado. Eso puede provocar accidentes caseros, que, sin pasar a mayores, generan molestias y potenciales daños.
Aunque no tiene que ver estrictamente con su funcionalidad, lo cierto es que unos auriculares inalámbricos son más estéticos. Estos modelos nuevos sin cable buscan tener un diseño más limpio y moderno.
Presente y futuro de los auriculares
La convergencia de estos factores ha creado una adopción masiva de auriculares inalámbricos en la sociedad moderna. Su impacto va más allá de la mera funcionalidad, convirtiéndolos en un accesorio cultural que refleja la convergencia de la tecnología, el estilo de vida y la demanda de experiencias más fluidas e inmersivas.
No sabemos a ciencia cierta cómo serán los modelos del futuro, pero sin lugar a dudas podremos esperar grandes cambios. La inteligencia artificial, para citar una posibilidad, es capaz de extender las capacidades de las cosas a niveles inimaginables. Ya lo ha demostrado.
¿Y la realidad aumentada? ¿Podrá fusionarse con estos accesorios? Sin lugar a dudas podría complementarse con experiencias de realidad virtual para una inmersión auditiva más completa.
O por qué no pensar, por ejemplo, en equipos con sensores sofisticados, ofreciendo mediciones precisas e incluso detectando de manera temprana problemas auditivos en el usuario. El panorama es muy grande e ilimitado.