Comunicar malas noticias es una de las tareas más difíciles que deben enfrentar los médicos, a pesar de lo cual ha sido considerada como una competencia menor, es por ello que se debe concientizar a quienes practican esta área de salud a que sean humanos, actúen con ética y sobre todo mantenga en estos momentos cruciales para el paciente, una esperanza, determinó Martha Elvia Quiñonez Meza, del Centro de Investigación y Docencia en Ciencias de la Salud (CIDOCS) de la Universidad Autónoma de Sinaloa (UAS).
La fundadora y presidenta del Comité de Ética en Investigación del CIDOCS de la UAS manifestó que ante esto la Universidad es humana y sensible y busca entonces estar capacitando, con charlas, a jóvenes residentes, en la idea de que conozcan de viva voz experiencias sobre la forma adecuada de transmitir a los pacientes malas noticias y en donde de manifiesto se pongan en su lugar, por ello dijo existen protocolos precisos para dicho abordaje.
Apuntó que los factores que dificultan la comunicación de malas noticias pueden provenir del ambiente sociocultural, del paciente o del propio médico, por ello la necesidad que se brinden aprendizajes de habilidades de comunicación entre el gremio y se pueda entonces producir un impacto positivo tanto en el dador como en el receptor de malas noticias, por lo que comentó que existen protocolos prácticos, como el de Baile y Buckman, en donde se establecen pasos claves a seguir desde donde se debe dar la noticia, hasta el dejar en el paciente una esperanza de vida, una luz en el camino.