Familia, amigos e integrantes de la comunidad deportiva, salieron a las calles de Escuinapa para exigir el regreso de Enrique Cortez Lizárraga, entrenador, árbitro y director técnico, quien se encuentra desparecido desde la madrugada del sábado.

Encabezada por su esposa e hijo, todos vestidos de color blanco, la marcha salió desde su casa en la zona centro de Escuinapa, recorrió varias calles y terminó en la plazuela Ramón Corona frente a la Presidencia Municipal.

Fue en este último lugar donde, los manifestantes colocaron las cartulinas alrededor del kiosco de la plazuela, donde exigen a las autoridades su intervención para dar el paradero del entrenador, de igual forma por momentos cerraban la circulación en la calle Miguel Hidalgo para mostrar sus pancartas.

Enrique iba acompañado de Ángel Francisco Rodríguez Parra, viajaban a bordo de un automóvil Nissan Sentra, color blanco, salieron a las 2:000 de la madrugada del sábado rumbo a la sindicatura de Villa Unión, Mazatlán a donde nunca llegaron.
