Santiago de Chile, 12 ene (EFE).- Desconocidos atacaron en la madrugada de hoy, con bombas incendiarias o explosivas, cuatro iglesias en Santiago, en rechazo a la visita a Chile que hará desde este lunes el papa Francisco, a quien los autores de los ataques amenazaron expresamente, según informaron las autoridades.
"Papa Francisco, las próximas bombas serán en tu sotana", decía un panfleto encontrado junto a una de las iglesias atacadas, en el municipio de Estación Central.
"Diez mil millones por el papa y los pobres nos morimos en las poblaciones", señalaba en tanto un escrito en la muralla del santuario 'Cristo Pobre", donde la policía pudo neutralizar un bidón aparentemente lleno de combustible dejado en el lugar por sujetos no identificados.
Además de los ataques a las iglesias, miembros de 'Andha Chile', movimiento que agrupa a deudores habitacionales, protestaron en la Nunciatura Apostólica, en el sector de Providencia, donde el papa Francisco se alojará mientras esté en Santiago durante su visita a Chile, que se extenderá del 15 al 18 de enero e incluye las ciudades de Temuco (sur) e Iquique (norte), además de Santiago.
"Andha Chile comienza agenda de lucha funando (escrachando) sede Nunciatura Apostólica. El problema no es la fe, sino los millones que gastan", afirmó la líder de la agrupación, Roxana Miranda, excandidata a la presidencia de Chile en 2013, según un vídeo grabado por los manifestantes, subido a Twitter.
Los manifestante fueron desalojados por la policía sin oponer resistencia.
El presupuesto para la visita del pontífice a Chile, según el sitio web de la organización oficial, es de aproximadamente 4.000 millones de pesos (unos 6 millones de dólares), mientras se ha dicho extraoficialmente que el Estado gastará otros 7.000 millones de pesos (unos 11 millones de dólares) en seguridad, transporte y logística, entre otros gastos.
En Concepción, a 515 kilómetros al sur de Santiago, desconocidos apedrearon y lanzaron pintura contra la sede de la Dirección del Trabajo, donde también desplegaron un lienzo alusivo a la causa mapuche y de rechazo a la visita del papa.
El hecho se lo adjudicó el Movimiento Juvenil Lautaro (MJL), un grupo de ultraizquierda que trató de persistir en acciones armadas tras el término de la dictadura de Augusto Pinochet, y fue desarticulado a principios de los años 90.
La presidenta Michelle Bachelet consideró "muy extraños", los ataques, durante una entrevista con radio Oasis.
"Sabemos que siempre habrá un grupo que otro, pero esto es muy extraño, porque no es algo que uno pueda identificar como un grupo específico, se llamaban algo así como 'por los cuerpos libres'" señaló la mandataria.
Más tarde, tras una reunión de coordinación sobre la visita papal en La Moneda, Bachelet declaró que el deber del Estado es garantizar la tranquilidad a los habitantes de las ciudades que visitará el papa.
Explicó que en la cita se revisaron las medidas para garantizar las condiciones de seguridad, orden público y sanitario en las ciudades en las que el papa encabezará eventos masivos.
"Quiero invitarlos a que vivamos esta visita en un clima de respeto, de solidaridad y de alegría entre nosotros y también lo hagamos entre quienes nos visiten desde otros países", sostuvo.
En ese contexto, añadió, se reforzarán aspectos como atención en salud privada, traslado de peregrinos, y reforzamiento de pasos fronterizos, "junto a refuerzo policial, para tener seguridad y tranquilidad en eventos masivos".
El arzobispado de Santiago, en tanto, manifestó en una declaración su dolor por los atentados, "que contradicen el espíritu de paz que anima la visita del papa al país".
"Con humildad y serenidad pedimos a quienes han realizado estos actos -que consideramos no representan en absoluto el sentir de la inmensa mayoría de la población-, reflexionar sobre la necesidad de que exista respeto y tolerancia entre todos, para construir una patria de hermanos", señala el texto.
"Chile necesita mayor diálogo, por esto reafirmamos el mensaje de Jesús que el papa nos trae: 'Mi Paz les Doy'", indico el arzobispado en la declaración".
El presidente electo, Sebastián Piñera, condenó a través de twitter los ataques a las iglesias católicas y afirmó que "el odio y la intolerancia no pueden primar por sobre el respeto y el Estado de Derecho. Recibamos al Papa Francisco con alegría y en paz".
El subsecretario del Interior, Mahmud Aleuy, recorrió los lugares afectados por los ataques y confirmó que el gobierno se querellará contra quienes resulten responsables.
Consideró asimismo, que los ataques son similares, "pero no necesariamente están vinculados unos a otros".
Aseguró al mismo tiempo que los lugares y parroquias que visitará el papa durante su visita "están categorizadas y resguardadas". aunque admitió que tras los ataques, "habrá que reforzar los recorridos para que no se repitan este tipo de hechos". EFE
ns/cfa
Notas de interés: