La cuesta de enero es una seria preocupación para las familias sinaloenses, que en su mayoría ven un escenario complicado para este año con la serie de incrementos que amenazan con desatarse a partir de un desmesurado aumento en los energéticos y la baja percepción económica de la mayoría de los trabajadores.
El poder adquisitivo de la clase trabajadora cada vez en menor ante la escalada inflacionaria, situación que mantiene en la zozobra a la mayoría de las familias.
Cientos de personas han tenido que recurrir a empeñar sus pertenencias ante la falta de liquidez para enfrentar el inicio de año, sin embargo la preocupación es mayúscula por la incertidumbre de ¿que pasará en los próximos meses?, esto ante el inminente incremento de algunos alimentos de la canasta básica, durante un año electoral que se percibe sumamente complicado.
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