En medio de la élite política mundial, la primera ministra de Nueva Zelanda llevó a su bebé de tres meses a la Asamblea General de la ONU.
Rompiendo el protocolo, Jacinda Ardern cargó a su pequeña hija y jugó con ella mientras esperaba su turno en el atril del máximo foro de Naciones Unidas.
Arden dio a luz en junio pasado y tuvo seis semanas de incapacidad por maternidad.
Regresó a su trabajo a principios de agosto.
El motivo de que Arden estuviera acompañada de su pequeña se debe a que aún está en periodo de lactancia y no podía dejarla en Nueva Zelanda.
A su lado también estuvo su pareja, Clarke Gayford, quien cuidó de la niña mientras la gobenrnate intervenía en la cumbre mundial.
Ardern, del Partido Laborista, asumió el cargo en octubre del año pasado al cerrar un acuerdo de gobierno con los verdes y un partido nacionalista tras las elecciones de septiembre que puso fin a nueve años de gobierno conservador.
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