Los padres de un joven que falleció a causa de una destrucción cerebral decidieron extraer los espermatozoides de su hijo para poder tener un nieto por medio de una gestación subrogada.
El caso generó gran polémica en el Tribunal Supremo de Gran Bretaña pero estos finalmente decidieron autorizar el proceso de extracción y congelación.
Hoy en día en pequeño tiene tres años y es criado por sus amorosos abuelos.
Notas de interés: