La finalidad del Día
Mundial de la Alimentación, proclamado en 1979 por la Organización de las
Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación es aumentar los
conocimientos de la población sobre el problema alimentario mundial y
fortalecer la solidaridad en la lucha contra el hambre, la desnutrición y la
pobreza.
En 1980, la Asamblea
General de la ONU respaldó la celebración del día por considerar que la
alimentación es un requisito para la supervivencia y el bienestar de la
humanidad y una necesidad humana fundamental.
En este 2018 este día trae
el lema "Hambre Cero".
Según la Organización de
las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación el hambre puede
desaparecer para el 2030 realizando las siguientes acciones, no tirar comida,
producir más con menos y adoptar una dieta más saludable y sostenible.
Cabe señalar que en el
mundo, según la FAO, en nuestro mundo
de abundancia, una de cada nueve personas no tiene suficiente para comer.
Alrededor
de 820 millones de personas siguen padeciendo hambre, la mayoría de ellas son
mujeres, unos 155 millones de niños padecen malnutrición crónica y pueden
sufrir los efectos del retraso del crecimiento durante todas sus vidas.
El hambre es la causa de casi la mitad de las muertes de niños menores de 1 año en todo el mundo, esta situación es intolerable. Es por ello que hoy en el día mundial de la alimentación, comprometámonos a lograr un mundo sin hambre: un mundo en el que todas las personas tengan acceso a una alimentación sana y nutritiva.
Notas de interés: