Esta es una hermosa historia de amor, pero amor del bueno, amor eterno, el que Don Carlos Nolasco le tiene hasta la eternidad en quien en vida fuera su único amor, María Guadalupe Ulloa Calderón, quien falleciera el mismo día en que nació pero del año 2010.
Don Carlos, dice que siempre va a su tumba, a visitarla, pues siempre la tiene presente en sus recuerdos.
Dijo que siempre fue su musa, ya que es compositor y le ha escrito alrededor de 100 canciones en su honor.
Con mucho amor, acude a la tumba a visitarla, lugar al que le lleva flores y veladoras, pues en su epitafio una frase dejó grabada, para siempre recordarla, que dice al pie de la letra: “Más allá de la oscuridad, está la luz”.
Señaló que espera un día reencontrarse con ella, aunque sea en la eternidad, para cantarle sus canciones y en especial, la de lágrimas por tí, que no se cansa de cantar.
Don Carlos, dijo que su esposa le dio 8 hijos de los que le sobreviven 7, además de sus nietos y bisnietos que lo acompañan en fechas como el Día de Muertos al panteón, a llevarle serenata a ese gran amor.
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