La comisión estatal para la protección contra riesgos sanitarios, advierte a la ciudadanía que almacenar o transportar gasolina en garrafones para agua es un riesgo para la salud, por lo que piden a las personas que realicen esa práctica, destruyan los envases luego de utilizarlos.
Es por eso que exhortan a las gasolineras a no vender combustible en ese tipo de recipientes y a las empresas purificadoras a rechazar los garrafones contaminados, a fin de evitar riesgos en la salud.
La COEPRISS, advirtió que aunque en la Entidad no se ha registrado desabasto de combustible, algunas personas utilizan bidones, garrafones y envases de plástico diversos para transportar combustible, exponiéndose a riesgos en el manejo inadecuado de ese tipo de combustibles y otros químicos.
Se advirtió que existe un grave riesgo para la salud si estos garrafones contaminados son usados nuevamente para adquirir agua purificada, aunque éstos se laven, ya que estuvieron en contacto con químicos abrasivos que impregnan el plástico y son dañinos para el organismo.
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