A fin de rescatar el “tesoro escondido” que representa el pueblo de Copala, el gobernador Quirino Ordaz Coppel puso en marcha junto con el presidente municipal de Concordia, José Felipe Garzón López, los trabajos de una nueva carretera que unirá esta pintoresca población con la autopista Mazatlán-Durango, con lo cual se reactivará su economía con la atracción de mayor turismo.
El mandatario estatal arribó en compañía de su esposa, Rosy Fuentes de Ordaz para iniciar los trabajos de construcción de un nuevo tramo carretero, proyecto que tenía ya cuatro años de planeación desde las pasadas administraciones municipales del Ayuntamiento de Concordia.
El gobernador Ordaz Coppel reconoció que Copala se encontraba muy abandonado, pues al construirse la autopista, quedó al margen del paso de viajeros y turistas, por lo que su economía empezó a decaer, al cerrar los restaurantes, los hoteles u hostales, y diversos comercios que vivían del turismo.
El gobernador del estado anunció que paralelamente a los trabajos de construcción de la carretera, se iniciará un ambicioso programa de rehabilitación del empedrado de las calles de esta comunidad, para que ofrezca una nueva y remozada cara a los turistas que pronto regresarán.
A su vez, el alcalde de Concordia, José Felipe Garzón López, reconoció que este proyecto tenía años sin haber sido concretado.
La explicación técnica estuvo a cargo del secretario de Obras Públicas, Osbaldo López Angulo, quien informó que la longitud de la carretera será de 1 mil 300 metros, con un ancho de calzada de 7 metros, conectará a la altura del kilómetro 191 de la autopista Mazatlán-Durango, y los trabajos quedarán concluidos antes de la temporada de lluvias.
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