Kathy y Brandon se encontraban muy enamorados, así que decidieron unir sus vidas, deseaban con todo su ser formar una familia y pasar el resto de sus vidas juntos.
En la ceremonia, la tía abuela de la novia, Alison, les dio un regalo con una etiqueta muy extraña, en ella podía leerse: "Abrir hasta la primera pelea".
La pareja de Michigan, Estados Unidos, le prometió a la mujer cumplir con la promesa de abrirlo hasta el momento que indicaba, aunque la curiosidad los mataba.
Como todas las parejas, Kathy y Brandon tuvieron muchos desacuerdos y discusiones, sin embargo, se negaban rotundamente a abrir el paquete por una poderosa razón.
"En nuestros nueve años juntos han habido muchos problemas, fuertes discusiones, gritos y ganas de rendirnos, pero ni ello nos había hecho abrir la caja. Lo hemos evitado porque eso simbolizaría el fracaso de nuestra relación. Es como si no tuviéramos lo suficiente para que nuestro matrimonio funcione por si solo", comentó Kathy.
"Entonces ocurrió, pero antes de abrirla nos cuestionamos si era la peor pelea que habíamos tenido y si pasaba otra más adelante, cómo le haríamos si ya no teníamos esa caja".
En una ocasión, mientras disfrutaban de una copa de vino, la pareja comenzó a hablar sobre una próxima boda a la que habían sido invitados, misma que sería en donde se habían conocido.
Comenzaron a discutir sobre el posible regalo que podrían dar a la pareja, entonces recordaron que irónicamente el regalo que más había llamado su atención continuaba sin ser abierto y escondido en el armario.
El regalo de la tía tenía nueve años cerrado, había pasado por tres mudanzas y sobrevivido a varias discusiones, siempre se cuestionaban si lo necesitarían más en otra ocasión.
Sin embargo, aunque lo habían estado guardando para esa discusión que fue irreconciliable, al calor de las copas decidieron que era momento de abrirlo.
En la caja había dos nota, una dirigida a Kathy y otra a Brandon, también un poco de dinero en efectivo para cada uno.
“Ve por pizza, gambas o algo que les guste a ambos”, es lo que decía la nota de Kathy, "Ve a buscar flores y una botella de vino", decía la de Brandon.
Pero eso no era todo lo que contenía la caja, también había un florero de cristal, dos copas de vino, jabón y sales de baño, todo lo necesario para que ambos superaran cualquier discusión o problema.
Y aunque el obsequio era precioso y muy bien pensado, fue un mensaje el que le terminó robando el corazón a la pareja.
“Desde que la tía nos dio esta caja, pensamos que era la clave para salvar nuestro matrimonio, un consejo valioso, desconocido para novatos como nosotros. Al final de cuentas mi tía abuela y su esposo habían estado casados por 50 años, así que pensamos que la caja podría salvarnos cuando fuera necesario y si, lo hizo”, concluyó Kathy.
La pareja necesitó paciencia, comprensión y compromiso para no abrir la caja en la primera discusión, tomaron la decisión de resolver las cosas por ellos mismos. Al final, la caja no fue abierta para salvarse de una discusión sino cuando se encontraban bien y aún así, su matrimonio se vio más fortalecido.
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