La 'amiga ambiental' más significativa para Mazatlán, la biodarda se fortalece con la llegada de una extensión adicional que reforzará a la ya existente en el puente Juárez.
La Directora de Ecología Municipal, Lourdes San Juan Gallardo informó que fue gracias a la generosidad de empresarios pesqueros, que además donaron un motor para embarcación. Precisó que después de analizarlo, se decidió que la biobarda permanecerá en el mismo sitio a fin de seguir siendo una barrera ecológica frente a 'islas de basura' en uno de los accesos principales al mar.
Ante los ojos de Javier Acosta Martínez, pescador de la zona que resguarda día y noche la biobarda, el proyecto ha demostrado que cumple con su propósito. Tan sólo el sábado sus manos ayudaron a sacar 10 toneladas de desechos de todo tipo, hasta los más inimaginables.
Para Sofía Trejo Lemus, impulsora de la biobarda mazatleca el andar de la misma se encuentra estancado desde que en las lluvias torrenciales, Javier el guardián de la biobarda perdió su lancha, por lo que requirió con urgencia el apoyo de más almas caritativas.
Destacó la importancia de que más integrantes de la iniciativa privada, autoridades y la sociedad misma se sumen a esta iniciativa que pretende colaborar para reducir la contaminación en la fuente de vida más grande de este planeta, los oceános.
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