La Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) clausuró de manera temporal la operación de una empresa minera ubicada en el municipio de Canales, Durango que sufrió un derrame de más de 5 mil 780 metros cúbicos de jales.
Dicha compañía se dedicaba a la extracción y tratamiento de minerales metálicos de plomo y zinc.
El personal de la instancia federal identificó la afectación de caminos vecinales “antiguo camino a Topia” y 8 mil metros cuadrados de superficie al interior de un predio particular denominado “Lagunita de Coroneles” en el que existe presencia de especies de pino y encino.
También se observó que a mil metros aguas abajo de la presa, había jal impregnado sobre el cauce del Arroyo San Bernabé y en una longitud de dos kilómetros sobre su margen, extendiéndose la contaminación hasta la localidad de San Bernabé.
Además de la clausura del lugar, la Profepa ordenó a la minera la contención del derrame proveniente de la ruptura de la presa, y la limpieza de los jales en las zonas afectadas, a la par de que ya se ha iniciado un proceso penal ante Fiscalía General de la República contra quien resulte responsable por la comisión de delitos contra el ambiente.
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