Cinco llamados para sofocar incendios de gavilla son los que se han registrado en lo que va de año en Cajeme. A decir del comandante de Bomberos de Cajeme esta nociva práctica ha disminuido hasta en un 60% respecto al 2019, aunque reconoció que pudieran haber sido un poco más los hechos debido a que sólo acuden donde pueden ingresar con las máquinas o donde existe riesgo de daños a personas, viviendas o automóviles de acuerdo al reporte que reciben del C5.
Tras lamentar que continúen presentándose pese a los casos conocidas en la población de padecimientos asmáticos, Ángel Francisco García Tellechea afirmó que de los cinco llamados que han atendido en lo que va del año, dos han sido de quemas intencionadas por parte de empleados que han sido sorprendidos llevándolas a cabo a quienes canalizaron a las autoridades de Seguridad Públcias.Llamo a los agricultores a no realizar esta practica por los daños que ocasionan.
García Tellechea explicó que debido a que las máquinas son electromecánicas, no pueden ingresar a todos los lugares por el riesgo de averías a las unidades y donde en años anteriores la reparación de una en un servicio rondó los 80 mil pesos al dañarse la transmisión.NOTAS DE INTERÉS:
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