En redes sociales se hizo viral la historia de “Covito”, un perro que esperó a su amo más de una semana afuera del Hospital General de Nuevo Laredo, sin saber que había muerto a causa de Covid-19.
Luego de que ningún familiar regresara por el can tras el deceso de su dueño, personas cercanas a la zona se hicieron cargo de él y lo alimentaron.
Después, con la ayuda de usuarios de redes sociales, su caso llegó a oídos de la activista Kendra Hernández, dueña de un refugio de animales, en el que actualmente cuida a más de 40 canes que ha rescatado de las calles de esta ciudad fronteriza.
“Me partió el alma que el perrito estaba solito en la calle… y pues decidí ir por él, me lo llevé a mi casa y pues gracias a Dios este las personas del otro lado decidieron llevársela y entregarlo a una familia”, explicó Kendra.
Con ayuda de la fundación Paws on Board de Laredo Texas, “Covito” fue llevado a Estados Unidos para que una familia lo adopte. Antes de salir del país, el can fue llevado al médico para una revisión general y también fue vacunado.
“Tengo entendido es que ese perrito se encontró afuera del hospital aquí en Nuevo Laredo esperando la salida de su amo que ya no volvió a salir del hospital porque perdió la vida, hicieron esta noticia en la página de Facebook pidiendo ayuda para ese perrito, así es como nosotros nos enteramos el caso de Covito”, detalló Tony García, activista de Laredo Texas.
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