A ocho años de la contaminación de las aguas del Río Sonora que afectó a miles de personas de los municipios aledaños, hemos trabajado en estrecha coordinación con el Gobierno de México, a favor de los sonorenses afectados, informó Alfonso Durazo Montaño.
El gobernador del Estado, destacó que trabajan en un programa de plantas purificadoras de agua para atender a las comunidades afectadas, y reafirmó el carácter prioritario de las obras como parte de los compromisos para responder a las demandas de las poblaciones.
Destacó que, entre las acciones que se realizan por el derrame en la mina Buenavista del Cobre, el 6 de agosto de 2014, se encuentran la rehabilitación de las plantas en Bacanuchi, Banámichi, Mazocahui, San Felipe de Jesús, Ures y Huépac, así como cuatro nuevas plantas adicionales en Aconchi, Arizpe, Baviácora y Huépac.
El Instituto Mexicano de Tecnología del Agua (IMTA), del Gobierno México, se comprometió a completar la rehabilitación de las primeras seis plantas para finales de este año, y los trabajos en la planta de San Rafael de Ures iniciarán en octubre; mientras que el resto dará inicio en diciembre, dijo, proyectos que se encuentran en proceso de licitación y de los cuales ya se tienen licitantes por parte de la Cámara Mexicana de la Industria de la Construcción (CMIC).