Decenas de familias perdieron su tranquilidad al quedar en medio del tiroteo que se registró la madrugada del Lunes en la colonia 6 de enero, entre presuntos delincuentes fuertemente armados y elementos de la policía estatal y de las fuerzas federales.
Aquello era el mismo infierno señalan los vecinos, quienes durante varios minutos estuvieron tirados en el piso, mientras cesaban los disparos.
En el recuento de los daños, ya con la luz del sol, se pudieron observar los estragos que hicieron las balas en las fachadas de las viviendas que se ubican sobre la calle Carlota Fernandez, entre Leona Vicario y Guadalupe Rojo,
varias casas con imapactos de bala en las fachadas y en los portones, automóviles con vidrios perforados por las balas y postes de luz astillados.
Sobre el pavimento y en las banquetas quedaron algunas esquirlas
y en algunos muros se pueden observar las balas incrustadas en el cemento.
La caída de los cables eléctricos dejaron perforaciones en el concreto, personal de la comisión federal de electricidad y de teléfonos de méxico realizaron las reparaciones del cableado y los transformadores que resultaron dañados durante la balacera.
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