Londres, 4 mar.- El Reino Unido no está preparado para abordar las negociaciones sobre la futura relación comercial con la Unión Europea (UE), advirtió este lunes el exembajador británico ante el bloque comunitario Ivan Rogers.
Según el antiguo diplomático en Bruselas, las negociaciones sobre comercio y seguridad, que podrían alargarse hasta cinco años, serán "mucho más complejas" que las que han tenido lugar hasta ahora.
Rogers afirmó hoy al "think tank" británico Institute for Government (IfG), compuesto por expertos independientes británicos para mejorar la eficacia del Ejecutivo, que la primera ministra, Theresa May, debería suprimir el departamento sobre el "brexit", a cuyo frente se encuentra Stephen Barclay.
A su juicio, debería ser ella quien tomara "personalmente" el control de esas negociaciones futuras con un equipo que reportara a su "número dos" en el gabinete, David Lidington.
"Va a ser una tarea mucho más importante. Va a afectar a todos los ministerios", advirtió el exembajador ante la UE, que presentó su dimisión en enero de 2017, tres meses antes del arranque formal del proceso negociador del "brexit" entre Londres y Bruselas.
"No puedes operar como lo ha hecho el Gobierno para el Acuerdo de Salida en una negociación comercial", aseveró, al tiempo que auguró que esta última negociación será "extremadamente difícil y controvertida".
Rogers manifestó que si alguien piensa que "lo último que escuchará sobre el 'brexit'" será cuando el Reino Unido abandone formalmente la UE se va a sentir "decepcionado".
"Estaremos en un estado de permanente negociación", predijo.
El diplomático fue uno de los principales asesores del exprimer ministro David Cameron en las negociaciones previas al histórico referendo europeo del 23 de junio de 2016, para lograr modificar los términos del encaje británico dentro del bloque común.
Esas conversaciones se saldaron con concesiones a Londres por parte de los 27 en lo tocante al acceso de los comunitarios al sistema de subsidios sociales del Reino Unido, pero los británicos votaron finalmente por marcharse de la UE.
Rogers fue también secretario privado del extitular de Finanzas Kenneth Clarke y trabajó con el exprimer ministro laborista Tony Blair.
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