Trabajadores del sector salud que fueron despedidos tras el cierre del programa federal PROSPERA tomaron las calles y realizaron una marcha pacífica en el puerto desde el Centro de Salud en la colonia Centro, hasta las oficinas de la Jurisdicción Sanitaria número 6 exigiendo respuestas de parte de las autoridades del nivel estado y federal.
A nombre de los protestantes, Lizeth Rodríguez Navarro, Nutrióloga jurisdiccional dijo que tras las manifestaciones que efectuaron la semana pasada, hubo una reprimenda, pues desde el lunes fueron borrados del checador del personal 20 trabajadores por instrucciones verbales desde la capital del estado.
Indicó que además de exigir una base sindical federalizada, se está pidiendo cubrir el adeudo por tres meses laborados, pues a la fecha la única respuesta de parte de la Secretaría de Salud es que no hay presupuesto para liquidarles.
Rodríguez Navarro sostuvo que la baja de ella y de más de 140 trabajadores contratados en todo el estado afecta seriamente al funcionamiento de los centros de salud, particularmente en los menores de 5 años a los que se les está dejando de aplicar la prueba de Evaluación de Desarrollo Infantil, que detecta alguna alteración en el desarrollo de los infantes. Los protestantes anunciaron que mantendrán las protestas hasta conseguir que sean atendidas sus demandas.
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