La jornada inició como cualquier otra.
Poco antes de las 8:00 horas ya habían tomado sus puestos, colocado cascos y arneses listos para iniciar el trabajo, pero esta vez con una motivación de por medio, la de festejar su día.
Así fue como los albañiles festejaron este tres de mayo, Día de la Santa Cruz, una fecha en donde recuerdan la satisfacción de desempeñar uno de los oficios más duros que existen, ese que va más allá de hacer la mezcla de cemento, mover la cuchara, pala y el cincel.
Yaneli Torres, forma parte del Departamento Seguridad en construcción en uno de los complejos turísticos que se levantan en Zona Dorada, asegura que sus compañeros se han convertido en motivo de admiración para ella, ganándose a pulso el festejo de este viernes.
Algunos con tamales, otros más con botana, refrescos y hasta con cochito tatemado, cada edificación celebró a su manera la tradición popular que han arraigado desde la religión, la que les lleva a encomendarse a la Santa Cruz por salud, seguridad en las alturas y mucho trabajo.
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