A ocho meses de los problemas que generaron en Sinaloa los fenómenos naturales Wila y la Tormenta Tropila 18-E en los planteles educativos, siguen a la espera de que radiquen los recursos por el Instituto Nacional De la Infraestructura Educativa.
Andrés Castro Rojo, director de ISIFE, señaló que a las 500 escuelas afectadas se les atendió de forma inmediata en las techumbres, posteriormente se inicio con la impermeabilización.
Precisó que las necesidades en las escuelas son permanentes, de los 6 mil planteles poco más de 2 mil requieren trabajos de mantenimiento.
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