De acuerdo con el relato de una mujer que vive en San Luis Río Colorado, Sonora, su sobrino junto con otros niños se burlaron de una menor de escasos recursos que juntaba latas para ayudar a su familia.
Por lo que decidió darle una lección, con la que pretendía enseñare al menor el esfuerzo que implicaba que la niña realizara una actividad por necesidad, para ayudar a generar recursos económicos en casa.
En esta publicación de Facebook se relata que el dinero recaudado por la venta de chicles se le dará a la menor, y cada que la vea el niño le ofrecerá una disculpa.
La historia abrió un debate entre usuarios, ya que algunos consideran que el castigo fue exagerado, mientras que otros opinan que la sanción fue algo ejemplar para enseñarle humidad al menor de edad.
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