Toni Standen es una mujer joven de 29 años de edad, quien entre febrero de 2019 y abril de 2020 le dijo a sus amigos y familiares que tenía un cáncer en estado terminal.
De acuerdo a medios británicos, todo era una mentira para poder decir que quería ser ayudada a conseguir su "último deseo", que era tener la boda de sus sueños y se terminó aprovechando de la lástima de sus conocidos, quienes amablemente le ayudaron a pagarla.
Tras causar lástima entre su círculo cercano comenzó a reunir donaciones hasta alcanzar a recaudar una suma superior a los 11 mil dólares estadounidenses.
Para convencer a todos que su estado de salud era grave y se deterioraba con el paso de los meses, Standen comenzó a afeitarse la cabeza e incluso llegó a conceder algunas entrevistas a diferentes medios.
A la prensa declaró que el cáncer que padecía se había extendido al cerebro y el resto de su cuerpo, esto mientras sus amistades hacían todo lo posible para recaudar fondos para que su boda fuera una realidad.
Una vez que logró conseguir su sueño de casarse, en Facebook comenzó a circular la noticia que Toni Standen había muerto, sin embargo fue ella misma quien desmintió la noticia culpando de este hecho a “hackers”, aunque la verdad se dio a conocer en abril de 2020, cuando declaró que se había contagiado de Covid-19.
“Me dijo que se estaba muriendo y caí en la trampa. Podría haber ganado un Oscar, su actuación fue así de buena. Nos engañó a todos", declaró a la prensa Cheryl Aston, una de sus compañeras de universidad.
Tras enterarse de lo ocurrido, los conocidos hablaron con la policía y después buscar acciones legales.
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